Las autoridades dieron caza a los hampones responsables de la muerte de dos oficiales de la Fuerza Pública, tras una persecución por aire y tierra. En el operativo detuvieron a 3 sospechosos y recuperaron la mercancia robada. Encapuchados y armados entraron a un centro turítico, redujeron al dueño, tomaron todos los objetos de valor y en un carro del dueño se marcharon a alta velocidad. Una llamada al 911 alertó a la policía que montó diferentes retenes. No hicieron caso a la señal de alto en uno de los retenes, abrieron fuego que la policía respondio: los dos policía salieron por los aires como hojas de papel. El automotor perdió el control, los encapuchados quedaron heridos, uno murió en el centro médico. La familia de las dos víctimas recibirán indemnización y ayuda psicológica por el Ministerio Público.